jueves, 12 de enero de 2012

Un fantasma triste

"Estoy aquí, boca arriba, pensando en aquel tiempo para olvidar mi soledad, porque no estoy acostada sólo por un rato. Y ni en la cama de mi madre, sino dentro de un cajón negro como el que se usa para enterrar a los muertos. Porque estoy muerta.
Siento el lugar en que estoy y pienso...
Pienso cuando maduraban los limones. En el viento de febrero que rompía los tallos de los helechos, antes que el abandono los secara; los limones maduros que llenaban con su olor el viejo patio".

Rulfo, Juan: Pedro Páramo

Rarezas

"Estoy sola. Una vez cada cien años abro los labios para decir algo y mi voz suena desconsolada en este vacío. Nadie oye... Y vosotras, pálidas luces, tampoco me oís... En la madrugada os engendra el pútrido pantano y vagáis hasta el alba, pero sin pensamiento, sin voluntad, sin una leve palpitación de vida. El Demonio, padre de la Eterna Materia, temiendo que la vida vuelva a renacer en vosotras, a cada instante crea en vosotras, como en la roca y en el agua, un flujo perpetuo de átomos y os hace cambiar de continuo."


Texto: Chéjov, Anton: La gaviota.
Foto: Ana.

Sabiduría Psicológica

"Para nuestros antepasados primitivos, la depresión era un estado beneficioso cuando se veían obligados a soportar un período de condiciones ambientales especialmente duras. Cuando las cosas se ponían feas, realmente no tenían más remedio que atrincherarse en sus refugios. Nuestros primitivos antepasados que se sentían deprimidos y se limitaban a permanecer sentados durante los tiempos más calamitosos, tenían más probabilidades de conservar sus recursos y sus energías, y, al obrar así, aumentaban sus posibilidades de sobrevivir hasta que los tiempos mejoraran. Probablemente, podemos ver un indicio de ese primitivo resudio emocional en nosotros mismos en un sábado frío y nublado de invierno, cuando, sin ninguna razón que podamos señalar particularmente, apenas tenemos ganas de hacer otra cosa más que rondar por la casa medio adormilados, probando algún que otro bocado y echando siestecitas."

"Somos objeto de una manipulación siempre que alguien reduce, por el medio que sea, nuestra capacidad para juzgar nuestras acciones"

Smith, Manuel J.: Cuando digo no, me siento culpable.